Todo cuento tiene un principio, o al menos se le supone.
Todo tránsito parte de algún lugar, para extenderse en el tiempo o rodearlo.
Empieza aquí; mi lugar se perdió caminando.
Los trozos que he dejado en el camino los reúno ahora para tejerme una alfombra; así, el invierno será menos crudo.
Sin más.
lunes, 30 de julio de 2007
Suscribirse a:
Entradas (Atom)